Hace poco que mis padres me llenaron la despensa de kiwis... y cuando digo que llenaron, me refiero al sentido más estricto de la palabra.
En el pueblo en el que crecí, abundan las plantaciones de kiwis...y de los mejores que hay en el mercado. Siempre que vamos, traemos surtido para varios meses. Se conservan bien, así que no hay problema... pero cuando ves tantos juntos, un día y otro, y otro... terminas por volverte terriblemente anti kiwis.
La forma más sencilla para evitar esa sensación, es elaborar con ellos recetas tan deliciosas como la que os proponemos hoy, esta riquísma macedonia verde de invierno.